Las Filipinas han ido escalando en la clasificación de países donde resulta fácil hacer negocios, gracias al compromiso de nuestro gobierno con la simplificación de los trámites para empresas. Hemos aprobado leyes para incrementar la transparencia y promover la honradez en la prestación de servicios. Hemos reducido la burocracia en las transacciones de servicios y abrir una base corporativa en las Filipinas ahora resulta un proceso muy eficiente.
Las Filipinas se rigen por un código civil cuya aplicación abarca a las empresas, los impuestos, los seguros y las relaciones laborales.
En las Filipinas, los notarios públicos deben certificar todos los documentos legales. Un notario público es un abogado calificado que da fe en un documento de que sus firmantes comparecieron personalmente. Las Filipinas forman parte del Convenio de la Apostilla y los documentos oficiales apostillados son reconocidos como legítimos para utilizarse en el extranjero.
Las Filipinas está en favor del arbitraje. Si usted está involucrado en una disputa legal, puede evitar un litigio prolongado y resolver disputas comerciales mediante el arbitrio.
Nos regimos por un marco jurídico diseñado por la Comisión de las Naciones Unidas para el Derecho Mercantil Internacional. Como resultado, el proceso arbitral es sencillo, refleja el consenso mundial y abarca todos los aspectos del proceso arbitral, desde el acuerdo, la composición y la jurisdicción del tribunal arbitral, hasta el grado de intervención del tribunal, pasando por el reconocimiento y la aplicación del laudo arbitral.